La misteriosa estatua de un perro que apareció a escasos metros de la escultura de la mujer mirando el mar en Playa Chica, fue retirada esta tarde por personal municipal del partido de General Pueyrredón.
El animal tenía la boca abierta, la lengua afuera y las orejas rotas, y su exposición duró pocas horas, por lo que pudieron verla algunos turistas curiosos que se acercaron al lugar esta mañana mientras caminaban por la costanera de Mar del Plata.
El episodio fue similar al ocurrido durante el verano con la escultura del médico y artista marplatense Mario Magrini: la figura apareció en el lugar de forma anónima, sin referencia alguna al autor de la obra.
En el caso de la escultura de Magrini, luego de varios días y a pedido de las autoridades municipales, el médico confesó públicamente que era el creador de la obra, que quedó emplazada en Playa Chica.
El artista contó que “buscó cierto misterio cuando emplazó la escultura”, que no tiene nombre, pero “no como estrategia de marketing ni para generar un mayor interés por el autor, sino para que la protagonista sea solo la obra misma”. (DIB) ACR
Fuente y Foto: DIB